“Dejo que el Espíritu Santo me diga a quién debo de regalárselo.” – Maritza Márquez.

Durante las horas santas de Jesús Está Vivo, procuro siempre llevar un rosario, me acompaña durante cada intercesión y dejo que el Espíritu Santo me diga a quién debo de regalárselo.

Llevo haciéndolo varios meses; es algo que alienta mucho a la persona por la cual estoy orando y yo espero que sea un signo de esperanza y de mucha fortaleza, que sólo da nuestra amada madre.

Durante la hora santa en la iglesia de Reina de Los Ángeles del mes de abril; sentí que se lo tenía que dar a una señora por la cual ya había hecho oración de intercesión, pero cuando me iba a acercar a ella, ya no estaba.

Casi a mi lado había una chica que veía que estaba llorando y no había querido oración, quería esperarse al final; pero había mucha gente y cuando por fin se animó a ir, ya se había acabado; me dio pena y le dije, no pudimos orar por ti pero siento en mi corazón que debo de regalarte este rosario que lo trajeron de Medjugorje; ella lo recibió y comenzó a llorar de forma desconsolada, me dijo no sabes lo que significa para mi.

Más tarde me llamó para ir con ella y me dijo te tengo que explicar; sucede que mi mejor amiga falleció la semana pasada y a ella le dieron un rosario igual aquí mismo el año pasado, este rosario acompañó a mi amiga durante estos meses y era para ella muy importante (qué entonces también había regalado).

Su mamá me dijo que el rosario de ella se había quedado en una imagen de la Virgen Peregrina, ya que había acompañado a su amiga y se lo habían dejado; cuando entregaron la Virgen se fue el rosario y ese me lo iba a quedar yo; así que estábamos tristes porque lo habíamos perdido.

Hoy que estamos todas juntas, su mamá y yo, de repente me das el rosario, para mi es obra de nuestra amada Madre.

Estoy muy conmovida y muy sorprendida por tan bello regalo y para mi es una señal que ella me acompaña.

Al final llegó la mamá de su amiga y nos dijo que habían recuperado el rosario y que al ver lo que había sucedido, se lo quedará ella.

Gracias a todas las personas que hacen posible estas muestras de amor, fe y esperanza.